CHICAGO — El elegantemente despeinado Robert Pattinson tiene una contagiosa y fuerte risa que nunca haría para su seductor amante vampiro, Edward Cullen.
El musculoso y refinado Taylor Lautner es de tamaño de bolsillo comparado con la amenazante estatura de su homólogo licántropo, Jacob Black.
La casual aunque guay Kristen Stewart puede ser una auténtica charlatana, no como su taciturna Bella Swan, la estudiante de instituto en medio de una guerra entre estos dos sobrenaturales objetos de deseo adolescente...¿Chica afortunada, verdad?. “Sí, pero eso es en las películas”, dice Stewart acerca dar vida a la moderna heroína gótica de la increíblemente popular saga Crepúsculo (85 millones de copias vendidas hasta ahora). “Simplemente soy la máxima fan. Si lees una historia, te gusta y conectas con ella, probablemente significa que te has involucrado en la historia, y yo consigo hacerlo al más alto nivel posible”.
La fantasía de Hollywood regularmente se mezcla con la realidad cotidiana para estas tres resplandecientes estrellas. Le ha llevado un tiempo a un navegador cultural como Oprah Winfrey apuntar hacia el fenómeno literario. Pero en esta mañana de principios de mayo, la fiebre crepuscular está rugiendo en los estudios Harpo, mientras los actores van hacia el backstage después de grabar un show que se emitirá el jueves. ¿La ocasión?. Eclipse, el tercer capítulo de la ya billonaria franquicia mundial, llega el 30 de junio.
A los actores no les asombra la chillante adoración de un amplio público femenino, muchos con camisetas de Team Edward y Team Jacob-, y escogidos por la pasión que sienten por la épica saga basada en los libros de Stephenie Meyer.
"¡A veces es tan bonito, predicar a los convertidos!, dice Pattinson, 24, el londinense sex symbol, y objeto principal de los chillidos. Gracias a sus devotas adoradoras, ha sido elevado del poco conocido papel secundario en Harry Potter a entrar en la lista de las 100 personas más influyentes en el mundo, en menos de tres años. Acudieron grandes cantidades de fans la noche antes a una proyección patrocinada por Oprah de una version no finalizada de Eclipse. Poco después, invadieron los twitters con sus “Oh, Dios Mío”,sobre la anticipada secuela de Crepúsculo y Luna Nueva.
Una vez que Stewart, 20, firmó laboriosamente el libro de invitados de Oprah, y Lautner, 18, dejó de practicar sus trucos de salón, los actores se sentaron en un sofá de piel para hablar de temas como los momentos icónicos que son recreados en Eclipse, sus relaciones con otras celebridades y lo que les espera en el futuro después de Crepúsculo..
El juego de la fama
Pero primero hay que hablar de la molestia que provoca estar en la lista de los más buscados por los paparazzi. Cuando se estrenó Luna Nueva el pasado otoño, apenas pasaba un día sin ver un titular sobre Lautner y la cantante country Taylor Swift, o especulaciones sobre si Pattinson y Stewart eran pareja en la vida real.
Sin embargo, últimamente se ha calmado de algún modo la histeria, a juzgar por el número de portadas libres de Crepúsculo en las revistas. “No sé si es la razón real, pero desde el ultimo año somos mejores escondiéndonos”, dice Pattinson.
"Esa es definitivamente la razón”, coincide Stewart. “Ellos simplemente hacen una historia que vaya con las fotos. Si nunca consiguen la foto, no hay historia. Simplemente somos buenos escondiéndonos ahora”.
Ese subterfugio incluye no negar ni confirmar si tienen una relación. Aunque claramente entre estos dos hay una conexión especial, dejando a un lado sus bromas pícaras. Digamos simplemente que no fue Lautner el que puso su mano en la pierna de Pattinson durante una parte de la entrevista.
Pero los tres se toman muy en serio sus obligaciones relacionadas con Crepúculo, no importa lo que requieran. Stewart incluso salta en pánico en un momento, temiendo haber escrito mal su saludo a Oprah. Le echa un vistazo al libro. “Believe-ie o ei?”.
"I antes de e, excepto después de c ," responde Pattinson. Ella lo comprueba. “Oh, sí”, dice alzando el puño triunfante. Pattinson ríe. “Yo casi escribo mal Oprah. Casi escribo Opera”.
Los actores tienen ganas de saber cómo fue la proyección de Eclipse, y están encantados de escuchar que cada elemento ha sido aumentado: el horror, el romance, la interacción entre sus personajes, los toques de humor que a menudo vienen a expensas de la rivalidad entre Edward y Jacob- especialmente después de forjar una alianza para salvar a Bella de una rabiosa armada de neófitos.
Stewart dice de la positiva acogida de Eclipse: “En este punto es una máquina bien engrasada. Hemos tenido un montón de tiempo para establecer sobre qué va , y un montón de tiempo en considerarla. Y esta vez nos dieron mucho más dinero. Así que es excitante”.
Pattinson, pareciendo asombrado, rápidamente aclara su afirmación : “Para la película. El presupuesto”.
Stewart se siente avergonzada. “Oh, Dios mío. No, no. Ni siquiera se me había ocurrido eso. Nos dieron mucho más dinero para hacer que la película se viese bien”.
Los protagonistas sí aumentaron sus sueldos- Stewart y Pattinson están llevando a casa cada uno 7.5 millones de dólares más un porcentaje de la taquilla, y Lautner 5 millones- mientras, el presupuesto de la película se ha incrementado hasta los 65 millones, todavía una cifra modesta comparada con franquicias similares.
El presupuesto extra parece haber dado sus frutos, especialmente con los efectos especiales. Incluso el alter-ego de Lautner, el lobo creado por ordenador, es más adorable ahora que en Luna Nueva. “Sí”, dice el actor tímidamente. “Fue muy mimoso. No sé si es lo que esperábamos”.
Parlotea sobre si contar una escena en la que la bestia de tamaño de un caballo dulcemente hocica a Bella, y ella le rasca la oreja. Después de un poco de persuasion, cede.
“Ese día fui al set y me puse un traje gris apretado…”..
“Hay diálogo y hablo con él “, explica Stewart. “Dije, ¿Cómo voy a hacer esto sin Taylor”. Así que en vez de que la actriz fingiera que estaba al lado de un gran lobo generado por ordenador, Lautner se ofreció voluntario para estar ahí.
"Básicamente, parecía un Teletubby”, continúa hablando sobre su vestuario. “Tenía un círculo en la cara, pero todo lo demás estaba cubierto. Era raro. Pero sí, estuve allí y literalmente me volqué”.
"En realidad acariciaría su cabeza”, añade Stewart.
Pattinson, mientras, se enfrentó a la formal proposición de matrimonio a Bella, que refleja el hecho de que, aunque el vampiro aparenta 17 años, en realidad proviene del siglo pasado.
"Estaba aterrorizado ese día”, dice de la escena, que se reservó hasta el final del rodaje. “La primera vez que leí el guión, pensé, “Esto es imposible”. Referencias a paseos y a compartir té helado en el porche, mientras Edward explica cómo habría cortejado a Bella en los viejos tiempos, se le atraviesan especialmente. “ Es tan serio. Finalmente convencí a los productores que que puedes interpretarlo con un poco de conciencia de que no eres un personaje de ficción. No estoy intentando ser parte de una novela gótica”.
Cuando Pattinson lo vio finalmente, sin embargo, se sorprendió gratamente. “ Parece difertente cuando lo ves”.
Sus perfiles han crecido con cada película, y su estatus de estrella les da la oportunidad de mezclarse con sus propios ídolos. Sin embargo, a menudo, las otras estrellas son las que les piden autógrafos para sus hijos.
"Me hice una foto con Ron Howard el año pasado en los Oscaras”, recuerda Pattinson. “Pensé que era la cosa más divertida. Le pregunté, ¿Es para tus hijos”, Y dijo, “No, es para mí. Quiero tenerla en mi móvil”. Volviendo la situación aún más rara: La hija de Howard, Bryce Dallas Howard, está en Eclipse.
Desafortunadamente, Pattinson aún tiene que conocer a su favorito, Jack Nicholson.
Stewart manifiesta: “Yo le he conocido”.
Pattinson: “¿Qué ?. ¿Cuándo lo conociste?”.
Stewart: "En una proyección de Into the Wild”, drama de 2007 dirigido por Sean Penn, donde actuó. “ Es exactamente como tú pensarías que es”.
Pattinson, sonando fastidiado: “Nunca me lo has contado”.
Lautner se une: “Yo sí le conocí, pero me senté a su lado en un partido de Los Lakers”.
Pattinson, completamente exasperado: “¿Qué?”
La vida más allá de Crepúsculo…
Siguiente tema. Los tres están tratando activamente de no encasillarse, hacienda proyectos en solitario entre las películas de la saga. Stewart y Pattinson, ambos devoradores de libros y cercanos al cine de autor, obtuvieron buenas críticas pero recaudación por debajo de lo esperado con sus dos últimos estrenos, la biografía de la banda femenina The Runaways y el melodrama romántico Remember Me.
Pero continúan siendo demandados para papeles más maduros. Stewart está encantada de ser parte de la version cinematográfica de la novela On the Road, de Jack Kerouac, que empieza a rodarse en agosto. Pattinson recientemente terminó el rodaje en Londres de Bel Ami, como un arribista del siglo XIX, junto a Kristin Scott Thomas, Uma Thurman y Christina Ricci. ¿Se acuesta con las tres?. “Sí, pero en absoluto son las típicas escenas de amor”, dice. Añade Stewart: “Todas las escenas son un poco raras. Un poco tensas. Y un poco desnudas”. Continúan las risas.
Mientras tanto, Lautner-un atleta natural que interpretó a una estrella dela pista en la taquillera comedia Valentine’s Day- parece inclinarse a convertirse en el próximo héroe de acción, con sus próximos papeles en el thriller Abduction y en Stretch Armstron, una aventura en 3-D basado en el musculoso juguete.¿Alguna vez tuvo uno de los muñecos, cuyos miembros pueden ser estirados como caramelo?. “No recuerdo tener uno de esos en mi casa, pero sí que recuerdo haberlos estirado”.
El próximo año, el 18 de noviembre, se estrena la siguiente película, Amanecer. El cuarto y presumiblemente ultimo libro está tan lleno de eventos- una boda, sexo por primera vez entre Bella y Edward , un grotesco y doloroso nacimiento- que se ha habldo de hacer dos películas seguidas. Y quizás en 3-D. Pero los actores solo pueden confirmar su participación.
Lo que sí se ha decidido es que el director será Bill Condon, el realizador detrás de Dreamgirls y guionista nominado al Oscar por Chicago.
¿Han conocido ya a Condon, quien publicó un comunicado en Facebook asegurando a los fans que aprecia el material,y que la película definitivamente no será un musical, a pesar de sus antecedentes?.
Lautner asiente.
Pattinson: “¿Cuándo le conociste””.
Lautner: “Un día.”
Stewart: “¿Tuvísteis una reunión?”
Lautner: “No, no”
Pattinson: “Yo le conocí literalmente hace tres noches”.
Stewart,con un enfado fingido: “Bueno, obviamente a mí no quiere conocerme”.
Fuente: crepusculo-es.
Traducción: Bellavampira
Conservar todos los créditos. Gracias.
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CHICAGO — Dashingly disheveled Robert Pattinson has an infectious, high-pitched laugh that would never do for his seductive vampire lover-boy, Edward Cullen.
Buff-and-polished Taylor Lautner is pocket-size compared with the looming stature of his werewolf counterpart, Jacob Black.
Casual yet cool Kristen Stewart can be a real chatterbox, unlike her moody Bella Swan, the high schooler in a romantic tug of war between these two supernatural objects of teen desire.
Lucky girl, right? "Yeah, but that's in the movies," Stewart says about bringing to life the modern-day Gothic heroine from the insanely popular Twilight book series (85 million copies sold so far). "I'm just the ultimate fan. If you read a story and you like it andconnect to it, it probably means you've inserted yourself in the story, and I get to do that on the most glorified level possible."
All things 'Twilight'
Hollywood fantasy regularly blends with everyday reality for these three blazing-hot rising stars. It has taken a while for a cultural navigator like Oprah Winfrey to zero in on the heat behind the literary-spawned phenom. But on this early May morning, Twilight fever is raging at Harpo Studios as the actors file into the backstage area after taping a show that aired Thursday. The occasion? Eclipse, the third chapter in an already billion-dollar worldwide franchise that arrives June 30.
The actors are unfazed by the shrieking adoration of a largely female audience, many in black Twilight T's — Team Edward and Team Jacob are duly represented — and all handpicked for their passion for the epic movie series based on author Stephenie Meyer's four-part saga.
"It's so nice sometimes, preaching to the converted," says Pattinson, 24, the London-born overnight sex symbol and primary reason for the screams. Thanks to his devoted worshipers, he has been elevated from a little-known Harry Potter supporting player to one of Time's 100 most influential people in the world in less than three years. They were out in force the night before at a Winfrey-sponsored screening of an unfinished print of Eclipse. Afterward, a firestorm of fan Tweets rife with "OMGs" gushed about the much-anticipated sequel to 2008's Twilight and last year's New Moon.
Once Stewart, 20, painstakingly signs Winfrey's guest book and Lautner, 18, stops practicing his grape-tossing parlor trick, the castmates settle into a buttery leather sofa to talk about such topics as the iconic moments that are re-created in Eclipse, run-ins with other celebrities and what the post-Twilight future holds.
The fame game
But, first, the pain of fame that comes from being on the paparazzi's most-wanted list is addressed. When New Moon opened last fall, barely a day went by without seeing a headline about Lautner and country cutie Taylor Swift or speculation on whether Pattison and Stewart are a real-life couple.
Although, lately, the frenzy has calmed somewhat, judging by the number of Twilight-free magazine covers at grocery checkouts. "I don't know if this is the actual reason why, but we have gotten better at hiding over the last year," Pattinson says.
"That's totally the reason," Stewart concurs. "They just make up a story to go along with the pictures. If they never get the picture, there's no story. We are just good hiders now."
Such subterfuge includes neither confirming nor denying that they are in a relationship. Yet there clearly is some sort of special connection between the two, what with their playful teasing and personal asides. Let's just say it wasn't Lautner who placed a hand on Pattinson's leg during a portion of the interview.
But all three take their Twilight-related duties to heart, whatever they might require. Stewart even leaps up in a panic at one point, fearing she misspelled a word in her salutation to Winfrey. She checks the book: "Believe — ie or ei?"
"I before e except after c," Pattinson responds. She checks. "Oh, yeah," she says with a triumphant fist pump.
Pattinson laughs. "I almost spelled Oprah wrong. I almost wrote Opera."
The actors are keen to know how Eclipse played to the crowd at the screening and are pleased to hear that every element has been heightened: the horror, the romance, the three-way interaction among their characters, the touches of humor that often come at the expense of Edward and Jacob's rivalry — especially after they forge a testy alliance to save Bella from a roving gang of rabid newborn vampires.
Stewart says of Eclipse's positive early reception: "It is a well-oiled machine at this point. We have had a lot of time to establish what this thing is about and a lot of time to consider it. And they gave us so much more money this time. So that is exciting."
Pattinson, looking bemused, quickly clarifies her statement. "For the film. The budget."
Stewart is chagrined. "Oh, my God. No, no. That didn't even occur to me. They gave us so much more money to make the film look good!"
The leads did get raises — Stewart and Pattinson are taking home a reported $7.5 million each plus a percentage of the gross, Lautner gets $5 million — while the production's price tag grew to $65 million, still modest compared with similar franchises.
Yet the few extra bucks seem to have paid off, especially with the effects. Even Lautner's CG wolf alter-ego is more adorable than in New Moon. "Yeah," says the actor, sheepishly. "It was very cuddly. I don't know if that's what we were aiming for."
He waffles over the wisdom of sharing an anecdote about the scene in which the vicious horse-sized beast sweetly nuzzles Bella and she scratches his ear. After a little coaxing, he relents.
"That day I came on set and put on this tight gray spandex suit ..."
"There is dialogue and I talk to him," Stewart explains. "I said, 'How am I going to do this without Taylor?' " So instead of the actress pretending that a massive computer-animated wolf was nearby, Lautner volunteered to be its stand-in.
"Basically, it looked like a Teletubby," he continues about his outfit. "I had this circle on the face but everything else was covered. It was weird. But, yeah, I stood there and would literally bend over ..."
"I would actually pet his head," Stewart adds.
Pattinson, meanwhile, struggled with Edward's rather formal proposal to Bella, which reflects the fact that although his vintage vampire looks 17, he hails from the turn of the last century.
"I was dreading the day it was coming," he says of the scene that was held until the very end of the shoot. "The first time I read the script, I thought, 'This is impossible.' " References to "promenades" and sharing "iced tea on the porch" as Edward explains how he would have courted Bella in the old days especially stuck in his throat. "It's so earnest. I finally convinced the producers that you can play it with a bit of awareness of not being a fictional character. I'm not trying to be part of a Gothic novel."
When Pattinson finally watched it, however, he was pleasantly surprised. "It seems different when you see it."
Their profiles have grown with each film, and celebrity status does afford them the chance to mingle with their own idols. Although, more often than not, the other stars are the ones bedazzled as they request autographs for their Twilight-crazed kids.
"I took a picture with Ron Howard last year at the Oscars," Pattinson recalls. "I thought it was the funniest thing. I asked, 'Is it for your kids?' He said, 'No, it's for me. I want to have it on my phone.' " Making the situation even odder: Howard's daughter, Bryce Dallas Howard, is in Eclipse.
Alas, Pattinson has yet to run into his favorite, Jack Nicholson.
Stewart pipes up: "I have."
Pattinson: "What? When did you meet?"
Stewart: "At a screening for Into the Wild," her 2007 coming-of-age drama directed by Sean Penn. "He was exactly like you think he would be."
Pattinson, sounding peeved: "You never told me that."
Lautner joins in. "I didn't meet him but I sat next to him at a Lakers game."
Pattinson, utterly exasperated: "What?"
Life beyond 'Twilight'
Next subject. The three are actively trying to ward off post-Twilight typecasting by doing solo projects in between. Stewart and Pattinson, both bookworms and drawn to art-house fare, earned OK reviews but underwhelming ticket sales for their two recent releases, the girl-band bio The Runaways and the romantic melodrama Remember Me.
But they continue to be in demand for more mature roles. Stewart is psyched to be a part of a big-screen version of Jack Kerouac's On the Road, which starts shooting in August. Pattinson recently wrapped his work on the London set of Bel Ami as a 19th-century social-climbing rogue opposite Kristin Scott Thomas, Uma Thurman and Christina Ricci. Does he bed all three?
"Yes, but they're not like typical love scenes at all," he says.
Adds Stewart: "They're all a little weird. A little edgy. And a little nude." Chuckling ensues.
Meanwhile, Lautner — a natural athlete who played a high school track star in the box-office-topping ensemble comedy Valentine's Day— seems to be angling to become the next big action hero with upcoming roles in the thriller Abduction and Stretch Armstrong, a 3-D adventure based on a toybox muscleman.
Did he ever own one of the dolls, whose limbs could be pulled and elongated like taffy? "I don't remember having one at my house, but I totally remember stretching that sucker."
Then there is the next Twilight feature, Breaking Dawn, opening Nov. 18 next year. The fourth and presumably final book is so jammed with life-altering events — a wedding, first-time sex between Bella and Edward, a grotesquely painful birth — that there has been talk of doing two films back to back. And it might even be in 3-D. But the actors can confirm only their involvement.
What has been decided is that Breaking Dawn's director will be Bill Condon, the filmmaker behind Dreamgirlsand Oscar-nominated screenwriter of Chicago.
Have they met Condon, who already posted a letter on Facebook reassuring fans of his appreciation of the material and that the film most definitely will not be a musical despite his résumé?
Lautner nods yes.
Pattinson: "When did you meet him?" Lautner: "One day." Stewart: "Did you have a meeting?" Lautner: "No, no." Pattinson: "I literally met him three nights ago."
Stewart, in a mock snit: "Well, he obviously doesn't want to meet me."
Source: USA Today.
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